sábado, 31 de mayo de 2025

UNA HISTORIA DE GOOGLE EARTH

 No era una gran ciudad. Ni una historia famosa. Solo una calle tranquila y dos sillas en el costado. Ahí, sin buscarlo, Google Earth capturó algo más que coordenadas: una historia de amor que fue desvaneciéndose con los años… como las hojas de otoño que nadie recoge.
En 2015, una pareja de ancianos aparece sentada frente a su casa. No necesitaban mucho: sólo estar juntos. Ella con su vestido, él mirando al frente. Había algo eterno en esa cotidianeidad tan simple.



2016 trajo la misma escena. Dos vidas cruzadas por décadas, acompañándose en silencio. Esas imágenes no decían mucho… hasta que dejaron de repetirse.


En 2017, algo se rompió: él ya no estaba. Ella sí. Y aunque seguía sentada en la misma banqueta, su soledad era imposible de ignorar. Se quedó ahí… como si esperara que el tiempo diera marcha atrás.


Para 2018, la puerta parecía más abierta que nunca… y sin embargo, nadie salía de ella. Ella ya no miraba al frente, sino al vacío. El tipo de vacío que solo conocen quienes han perdido a quien era su todo.



En 2020, la cámara la captó una vez más. Más delgada. Más frágil. Pero firme y tenaz. Como si cada año esperara que, con suerte, él regresara con la siguiente toma.



2021 fue diferente. Ella parecía más pequeña, casi fundida con la silla. El amor puede sostenernos muchos años, pero el cuerpo, tarde o temprano, se rinde.



En 2022, ya no había nadie. Solo la puerta cerrada. Quizá por fin se reencontraron. Quizá la espera terminó...



2024 mostró las obvias y tristes señales del olvido: Las sillas apiladas, La pintura raída... Como si la casa también estuviera de luto.



Y en 2025… ya no queda casa. Tan sólo un terreno vacío. Y una historia que nunca fue contada en voz alta, pero que Google guardó por accidente. O por destino.
Porque a veces, lo más real, lo más profundo, no se publica ni se viraliza. Sino vive en la memoria de quien lo mira con el corazón.
Una historia real y desconocida de Google Earth.





miércoles, 6 de noviembre de 2024

MEDUSA: LA HISTORIA COMPLETA


 

Según la Mitología Griega, Medusa era una Gorgona y tenía una característica que la diferenciaba: ya que era la única mortal y la más bella entre sus hermanas. Medusa es uno de los personajes de la mitología griega más fáciles de reconocer a simple vista. 
Con su inconfundible cabello de serpientes y el poder de convertir a quien la mire en piedra, es uno de los monstruos más populares en las historias de la antigüedad. Pero hay una parte de su historia que nunca se cuenta y que casi nadie conoce...
Su belleza deslumbró a Poseidón, quien trató de seducirla, y ante las reiteradas negativas de nuestra protagonista, dicha deidad termina violándola en el templo de Atenea, donde inocentemente fue a pedir ayuda a la Diosa. 
La injustificada ira de Atenea fue tan grande, que castigó a Medusa convirtiéndola en un monstruo, con manos metálicas, colmillos afilados, unos ojos que emitían una fulgurante y cegadora luz, que hacía que quienes los miraran directamente, quedaran petrificados.
No conforme con este castigo, Afrodita también se vió celosa de la hermosa cabellera que tenía Medusa (sí, este tipo de gente existe desde que caminábamos por los árboles) razón por lo cuál dentro del castigo hizo que en lugar de cabello, tuviera serpientes, de esta manera, Medusa fue desterrada y sentenciada a vivir en las tierras hiperbóreas.
De aquella relación que hubo entre Poseidón y Medusa, surgió un embarazo, lo que no hizo más que incrementar el rencor de Atenea, que ordenó a Perseo dar muerte a Medusa. 
Perseo le cortó la cabeza de un solo golpe de espada. 
La cabeza de Medusa fue llevada ante la mismísima Atenea, quien la utilizara como escudo en todas sus batallas, tal como hiciera Perseo anteriormente para rescatar a Andrómeda y poder matar a Polidectes.
También su sangre fue guardada, ya que la de su vena izquierda era un veneno mortal, y la del lado derecho tenía características sanadoras. 
Cuando Perseo la decapitó, de su cuello brotaron el gigante Crisaor y caballo alado Pegaso, ambos son considerados como los hijos de Poseidón, lo cual quiere decir que fueron fruto de una violación y que Medusa estaba embarazada cuando la asesinaron.

Medusa resultó no ser el verdadero monstruo en esta historia...

sábado, 27 de abril de 2024

EL MISTERIO DE KASPAR HAUSER

No era mucho lo que tenía, pero lo mismo se sintió satisfecho. Su fino olfato, desarrollado en las actividades como jefe de policía en Nürenberg, le hacía dar casi por sentado que estaba a punto de resolver un enigma que alborotaba a los alemanes durante aquella primavera de 1828. Anselm Ritter Von Feuerbach se apoltronó en su sillón de cuero de Rusia y casi se felicitó a sí mismo por sus extraordinarios dotes de detective. Lo hubiera hecho en voz alta, incluso, de no ser porque sintió una presencia muy pesada tras de sí, como si estuviera mirándolo fijamente. Girando velozmente la cabeza, se encontró con aquello que la pura lógica le indicó que encontraría: la nada más absoluta.
Para entonces, ya tenía pensado el caso de Kaspar Hauser más de mil veces. Con una prolijidad sumamente obsesiva, aunque metódica también, Feuerbach había tomado nota en una carpeta la historia de ese muchacho que aparentaba tener 17 años, ancho de hombros y espalda de cosaco. Ojos azul claro, pelo casi rubio, pies no mas grandes de lo normal para su físico y manos de aristócrata. En otra libreta más pequeña, el policía pensaba plasmar sus conclusiones, pero sus páginas aún guardaban la inmaculada pureza del blanco. No porque no tuviera nada qué escribir, ya que a esas alturas había analizado una vasta cantidad de ideas dentro de su mente. Sino que todavía restaba un detalle no menor para él: escribirlas por orden de importancia.
El muchacho -le gustaba llamarlo así- había aparecido en el zaguán de la casa de un zapatero el día 26 de mayo, y el calendario de 1828 señalaba que se trataba de un "Lunes de Pentecostés".
"Una simple casualidad" se dijo a sí mismo. El joven traía consigo dos cartas, en una, su madre contaba que había bautizado al muchacho con el nombre Kaspar, y que tuvo a bien darle el apellido Hauser, perteneciente a su ya fallecido padre; que tomó la durísima pero necesaria decisión de abandonarlo porque, según relataba en la misiva, era imposible para ella alimentarlo dignamente. Suplicó además que fuera enviado al Regimiento de Caballería ni bien Kaspar hubiera cumplido la mayoría de edad. Consignaba también, entre otros detalles muy bien redactados, que la fecha de nacimiento del pequeño Hauser era el 20 de Abril de 1812. La madre se identificaba a sí misma como una pobre mujer.



El joven, por la época en que se lo halló, en 1828.



En el otro manuscrito alguien contaba, a su vez, que el joven había sido abandonado en la puerta de su casa una cruda noche de invierno de 1815, que nada sabía de él, salvo que deseaba convertirse en soldado. La misiva concluía de una manera muy poco humanitaria: "No tiene dinero, y si alguna vez manifestara que no necesita tenerlo, debe usted colgarlo de un campanario, o ya de plano, matarlo a golpes". Feuerbach no lo dudó demasiado: "no son mas que pistas falsas" se dijo, y acto seguido, eliminó como fuente de información tambien al zapatero.
El Capitán Qessening, del célebre Sexto de Caballería de Nürenberg, parecía ser la persona más indicada y fiable en el asunto de aportar datos. Se dijo que Kaspar Hauser había sido llevado a su presencia dando tumbos, y con los pies ampollados y sangrantes, "como si no estuviera acostumbrado a caminar".
La carne y la cerveza lo descomponían.
Sólo aceptaba pan y leche.
No podía hilar una frase, por breve que ésta fuera.
Todo su léxico se limitaba únicamente a dos palabras: saludaba a todo el mundo como "joven". E identificaba a cualquier animal como "caballo".
Aunque con el tiempo, el muchacho se las arreglaría para hacerse entender un poco más, eso no había sido suficiente para brindar la información necesaria. Fue como tratar de resolver un revoltijo de ideas sueltas, datos azarosos y vagos recuerdos personales, tarea para nada sencilla; pero lo que arrojó como resultado, se sintetiza que durante  sus 17 años vivió en un ambiente reducidísimo, de tal vez no más de dos metros de largo, por uno de ancho y uno y medio de altura. Feuerbach había fijado sus ojos en un tal Stanhope para seguir el carretel de sus pensamientos, y así, tratar de resolver el misterio del joven Hauser.
El nuevo personaje en esta trama era, en cambio, un viejo conocido. Aventurero, hermanastro de la famosa Lady Hester Stanhope, sobrino del Primer Ministro ingles, William Pitt y, por sobre todo, estrecho amigo y fiel colaborador de la familia ducal de Baden. Lord Stanhope hizo acto de presencia en Nürenberg y demostró un peculiar interés en Kaspar, a tal punto, que en poco tiempo logró ganarse su confianza.
Una coincidencia temporal afirmó en el investigador del caso que el muchacho podría ser tomado como cualquier cosa, salvo por un mitómano. Con Lord Stanhope todavía en la ciudad, el joven Kaspar sufrió el primero de varios intentos de ser borrado del mapa. Concretamente, se supo que fue hallado ensangrentado e inconsciente en el sótano del regimiento. Como era habitual, sus testimonios dejaron mas dudas que certezas. Había relatado, apenas, que alguien desconocido, cuchillo en mano, se abalanzó sobre él, y sin embargo, el profundo corte que presentaba en la cabeza era prueba inequívoca que se trataba de un intento de asesinato. ¿quién? Jamás se supo, debido a que el identikit que Hauser fue capaz de proporcionar resultó demasiado burdo y carente de información -mediana estatura, abrigo negro, guantes de cuero, lustrosas botas- por lo que no costó suponer que se trató de un simple suicidio frustrado. En resumen, tanto para las autoridades como para los civiles, Kaspar Hauser no sólo era un mentiroso, sino también un desequilibrado mental. Sólamente Feuerbach descartó ambas hipótesis, prefiriendo interesarse el el súbito deseo de Lord Stanhope por adoptar al muchacho. Quizás porque la "mezcla" entre un salvaje joven abandonado y un noble era algo que no encajaba en ningún esquema... Hasta ese momento.
Un fino haz de luz del alba se colaba por un borde que el cortinado del ventanal del escritorio había dejado al descubierto. En ese momento, Feuerbach se disponía a estrenar su libreta de conclusiones. Allí escribió, muy prolijamente, que "Kaspar hauser era hijo legítimo de un príncipe, por ende, a su vida o muerte, están ligados grandes intereses. Las personas que conocen este secreto tienen no sólo los medios, sino también el poder para intentar perpetrar un nuevo intento de asesinato contra él"



Feuerbach, el detective.


Feuerbach volvió a experimentar esa sensación de orgullo hacia sí mismo, tal como en el comienzo de aquella noche, en que se encerró en su estudio, con sus notas, a pensar. Se dejó, para la hora de su café de las tardes, su última anotación: nada más y nada menos que sus propias conclusiones acerca de la identidad del tal Hauser. La tenía en mente, aún dándole su forma final antes de volcarla en el papel, para terminar el manuscrito con la mayor prolijidad y esmero posibles. Una vez planeado esto, se dirigiría a su hogar a dar cuenta de una cena en solitario y descansar; pero nunca pudo prever que jamás llegaría, pues, a la salida del departamento de policía, fue salvajemente atropellado por un carruaje tirado por cuatro caballos blancos. Tal vez esté de mas añadir que ni el cochero fue identificado, como tampoco hallado el carruaje.
El día del funeral del sagaz detective Anselm Ritter von Feuerbach, fue una jornada, digamos, bastante feliz para Lord Stanhope. Y, según parece, para el joven Kaspar también. La justicia alemana había fallado. Había convalidado la adopción y los había convertido en padre e hijo con todas las de la ley.
Esa fue la época más feliz para el muchacho. Pudo educarse, terminar sus estudios, y hasta llegó a escribir una serie de poesías que la crítica de esos tiempos recibió con mucho deleite, por su lenguqje refinado y sofisticado y por su espiritualidad. Pero lamentablemente, no todo iba a ser tan maravilloso...
Un mes más tarde, se abriría una nueva fosa en el cementerio de Nürenberg: la del mismísimo Kaspar Hauser. Su vida había llegado a su final a raíz de una daga que atravesó su corazón, en los jardines del palacio de la familia Stanhope. Durante tres días estuvo debatiéndose entre la vida y la muerte, sufriendo el ardor y el delirio provocados por una fiebre casi despiadada, pero que no le había impedido redactar su manuscrito póstumo: se trataba, nada menos, que la descripción de su atacante, y al cual describió, curiosamente, de manera idéntica a aquel sujeto que había atentado contra él la primera vez, en los sótanos del Regimiento de Caballería. Para Lord Stanhope fue inevitable reflotar la hipótesis del ya mencionado suicidio.

Carta de su puño y letra.


De boca en boca, un fuerte rumor se hizo lugar en toda Nürenberg: la gran Duquesa Estefanía, de la casa de Baden, había lamentado muchísimo, entre amargas lágrimas, la muerte del muchacho. Fue entonces cuando se recordó que diecisiete años atrás hubo dado a luz a un varón y que éste, según se dijo, falleció un par de semanas más tarde. Por ende, le hubiera correspondido la corona por derecho sucesorio, pero con su muerte o desaparición, si se quiere, se abrió paso a otra rama en el árbol de la familia real. Y diecisiete años más tarde, a una lluvia de intrigas palaciegas... ¿era Kaspar Hauser, acaso, el hijo "muerto" de la gran duquesa?
A diez pies bajo tierra, Anselm Ritter von Feuerbach, el brillante detective, se llevó ese secreto a la tumba.
De donde jamás salió.

domingo, 21 de enero de 2024

PREGUNTAS QUE QUIZÁS NUNCA TE HICISTE


 


Algunas preguntas para pensar:

1- ¿Qué hace una pirámide egipcia en un billete de dólar estadounidense?

2- ¿Por qué 56 países firmaron un tratado para no aventurarse en la Antártida?

3- ¿Por qué los aviones nunca sobrevuelan la Antártida?

4- ¿Cómo "perdió" la NASA las imágenes del alunizaje, probablemente uno de los momentos más importantes para la humanidad?

5- Si Neil Armstrong fue el primero en poner un pie en la luna, ¿quién sostenía la cámara?

6- ¿Por qué nunca hemos vuelto a la luna?

7- Si los monos evolucionaron en personas, ¿por qué los monos siguen siendo monos?

8- ¿Cómo existe el 95% del ADN "basura"? ¿Quién decidió que esto es realmente "basura"?

9- ¿De qué manera fueron creadas estructuras gigantes, simétricas, detalladas, sagradas y geométricamente sólidas como catedrales y edificios del parlamento por personas que vivían en chozas de madera, montaban en carruajes tirados por caballos y no tenían máquinas ni láseres?

10- ¿Cómo es que ésta misma arquitectura prediluviana se encuentra en todo el mundo?

11- ¿Por qué hay imágenes en el arte antiguo egipcio, y de otras cultura también, que parecen representar "naves espaciales"?

12- ¿Por qué se encuentran restos e imágenes de seres humanos gigantes? ¿Y por qué se habla de gigantes en varios escritos antiguos de culturas distantes unas de otras, incluyendo la Biblia?

13- ¿Por qué las obras de arte antiguas egipcias representan pinos y es coincidencia que hasta la glándula pineal se parezca a un pino?

14- ¿Por qué hay representaciones de dragones en todo el mundo y en diferentes culturas, con miles de años de diferencia y también se menciona en la Biblia?

15- ¿Por qué hay tanto simbolismo descaradamente demoníaco en la industria de la música y el entretenimiento?

16- ¿Por qué la mayoría de los videojuegos giran en torno a matar?

17- ¿Cómo es posible que películas y dibujos animados como Los Simpson sean capaces de predecir eventos culturales específicos con tanto detalle y precisión?

18- ¿Cómo derriten los incendios forestales los vehículos, dejando los árboles intactos?

19- ¿Cuál es la deuda pública? Porque si hay un deudor, también hay un acreedor: ¿quién es?

20- ¿Cómo es que la llamada "deuda pública" está creciendo a pesar del aumento de impuestos? ¿A dónde va el dinero de los contribuyentes?

21- ¿Por qué el envenenamiento regular con alcohol y tabaco se considera "normal" y eufemísticamente llamado "beber" y "fumar"?

22- ¿Por qué el alcohol y el tabaco están representados en casi todos los programas y películas?

23- ¿Cómo los presentadores de noticias alrededor del mundo y en diferentes canales dicen y repiten el mismo guión a la letra?

24- Si estamos más avanzados e informados que nunca, ¿por qué tenemos las tasas más altas de obesidad, cáncer y problemas cardíacos, sin mencionar la depresión?

Si usted hallara las respuestas, por favor, siéntase libre de ilustrarnos abajo 👇 en la caja de comentarios...

viernes, 7 de julio de 2023

UN VIAJE DE PESADILLA




 El tiempo y las experiencias vividas en aguas profundas suelen ser, para los que no somos marinos, algo digno de fascinación...
El solo hecho de preguntarnos, entre nuestra mente y la almohada, sobre cómo sería pasar una noche serena y estrellada en altamar, o, como contrapartida, atravesar una feroz tormenta, es digno de la mayor de las incógnitas.
Mucha incertidumbre, pero poquísima certeza.
Me recuerda que hace más de treinta años, leí un artículo publicado en una revista (de la cual yo era muy adepto y regular lector) acerca de una curiosa entrevista a un experimentado marino irlandés, llamado Jerome Wallace, quien recorrió los siete mares del mundo a bordo del "Praga" su viejo y gallardo velero.
En esa entrevista, relataba lo ocurrido en la madrugada del 24 de Febrero de 1985, poco después de haber abandonado el puerto de Fort Lauderdale, Florida, E.E.U.U.
En cierto momento de esa travesía, Wallace nos cuenta que el barco experimentaba una brutal sacudida, tal como si hubiera encallado en un banco de arena, escorando muy peligrosamente hacia la banda de estribor. Aterrorizado, en medio de altas olas que surgían, inexplicablemente, de un mar calmo, vio algo así como un monstruoso tentáculo de unos 15 metros de largo, enroscándose a lo largo del mástil de la sufrida nave. Los chirridos de las amuras y el ruido del maderamen del navío quebrándose eran espantosos.
De pronto, ya en un paroxismo de terror, vio cómo un segundo brazo de esa bestia descomunal, ésta vez de color perla, emergía del agua y pasaba sobre la borda. Delante de la proa, alcanzó a divisar el enorme bulto de una cabeza de pulpo, o algo así...
Hacha en mano, Wallace cercenó de un solo golpe el primer tentáculo, lo cual hizo que la gigantesca criatura abandonara el barco, para regresar a los vastos fondos abisales, de donde provenía, envuelto en una nube de vapor oscuro.
Esa noche, a Jerome Wallace, el pelo se le volvió completamente blanco para siempre.

jueves, 23 de febrero de 2023

LOS SECRETOS DEL JOVEN HITLER


Es sencillo definir a un personaje pasado sólo por la época que le hizo quedar retratado en los libros de historia. Ceñir una vida entera a un período concreto permite ser más concienzudo, es innegable, pero también impide al espectador entender cómo se construyó la personalidad del sujeto en cuestión y cómo llegó a convertirse en quién fue. El caso de Adolf Hitler es todavía más exagerado, pues obviar su infancia nos ayuda a arrebatarle la humanidad. La realidad, por el contrario, es el que otrora líder nazi pasó una juventud bohemia acompañado del que, por entonces, era su gran y único amigo: August Kubizek , quien definió de forma más que pormenorizada el carácter abrumador e inestable del pequeño Führer mucho antes de la II Guerra Mundial.
Kubizek, como escribió en su libro "El joven Hitler que conocí" , vino al mundo pocos meses antes que Adolf, el 3 de agosto de 1888 . De clase baja (su padre era tapicero y su madre era hija de un herrero), superó una juventud modesta que casi lindaba con la pobreza. Las malas calificaciones no le ayudaban. Sin embargo, había algo en él que el joven August adoraba por encima de todo; una pasión que compartía con el entonces futuro líder nazi: su amor por las artes. «Había una afición que se había ido infiltrando en mi vida, y a la que me entregué con todo mi corazón: la música. Este amor encontró su expresión visible cuando, contando yo nueve años, recibí como regalo un violín en las navidades de 1897». Eso sería lo que le acercaría al Führer .

PRIMERA IMPRESIÓN.
August y Adolf se conocieron, según el primero, «alrededor de la festividad de Todos los Santos en el año 1904». Aunque esta fecha ha sido posteriormente calificada de falsa por algunos historiadores (en realidad, lo mismo que las memorias de Kubizek, las cuales han sido tildadas de exageradas por autores como Nerin E. Gun ). Más allá de estas dudas, el chico dejó escrito que vio por primera vez a su nuevo amigo durante una ópera en Linz, Austria. Debido a que ambos competían por la misma localidad, según cita el propio Kubizek: «una columna en la zona de paseo, en la que nos apoyábamos». Y no solo porque les permitía ver todo el escenario, sino porque era de las más baratas. Su primera impresión fue halagüeña. Le definió, de hecho, como un joven de buena familia. Y todo ello, a pesar de que ambos eran igual de pobres:
«Era un joven curiosamente pálido, delgado, de la misma edad aproximadamente que yo, que seguía con ojos resplandecientes la representación. No cabía duda de que era de una casa acomodada, pues iba siempre pulcramente vestido y se mostraba sumamente reservado. […] En una de las representaciones entramos en conversación en uno de los entreactos. […] Me sentí asombrado por la segura y rápida comprensión de mi interlocutor. No cabía la menor duda de que me era superior en este aspecto. Por el contrario, él reconocía mi superioridad cuando la conversación se refería a temas meramente musicales […] A partir de aquel día nos encontramos a cada representación de ópera».
A partir de entonces, y durante los cuatro años que esta extraña pareja compartió, Kubizek hizo un retrato del joven Adolf. Una instantánea nada halagadora, todo sea dicho, aunque se esforzó por disimular los datos más sórdidos por miedo a la censura.
En el libro "El Tercer Reich" , el doctor en historia Thomas Childers afirma que August fotografió con palabras a un Führer solitario y marginado. Un joven que solo tenía un amigo verdadero, que no sentía interés por las chicas ni el sexo (el cual temía, aunque también le fascinaba), que evitaba siempre el contacto físico y que era reacio a «cualquier cosa que tuviera que ver con el cuerpo humano». A cambio, estaba seguro de que sus escasas habilidades le convertirían en una estrella; un artista o un arquitecto de éxito que construiría edificios para el gran Reich germano.
Childers también deja patente las limitaciones de Hitler como estudiante (llegó a reprobar el alemán, entre otras materias) y afirma que, cuando se trasladó a Viena en 1907, vivió una vida bohemia en un minúsculo apartamento lleno de chinches que sólo pudo pagar gracias a la pensión que recibía tras el fallecimiento de sus padres, a los cuadros que lograba vender a tiendas de muebles, los cuales eran utilizados como mera decoración por su precio, y a que Kubizek se decidió a vivir con él y así sufragarle la mitad del alquiler, desde febrero hasta julio de 1908. Allí tomó la costumbre de visitar cafés hasta altas horas de la noche y apenas dormir. Durante este tiempo, además, August desvela en su obra que el joven Adolf era sumamente irascible y que era imposible llevarle la contraria cuando exponía sus opiniones.

RETRATO "ROBOT"
En los primeros capítulos de sus memorias, Kubizek trata de acercar al lector la imagen y el carácter de Adolf. Lo primero que destaca de él es que odiaba ser fotografiado, por lo que, en la actualidad, es difícil hallar instantáneas de su juventud. «Mi amigo jamás sintió, por lo que yo recuerde, la necesidad de hacerse retratar. Era todo menos presuntuoso. A pesar de que se preocupaba mucho de su persona, no era presumido en el sentido corriente de esta palabra. Incluso me atrevo a decir que ser presumido era demasiado poco para él. Era demasiado inteligente para ello». Desde su perspectiva, eso sí, el futuro líder nazi guardaba gran parecido con su madre. Así le describió a nivel físico:
«Era de estatura media y esbelto, por aquel entonces ya algo más alto que su madre. Su constitución no era en modo alguno la de un hombre fuerte, sino más bien delgado y frágil. Su salud era peor de lo que hubiese sido de desear y él se lamentaba frecuentemente de ello. Tenía que protegerse ante el clima nebuloso y húmedo de Linz durante los meses de invierno. […] En resumen, era débil de pulmones. La nariz, muy regular y bien proporcionada. La frente, despejada y libre, ligeramente inclinada hacia atrás. Me sabía mal que, por aquel entonces, tuviera la costumbre de peinar su cabello muy hacia la frente».

Pero lo que más llamó la atención a August de Hitler durante los cuatro años que compartió con él fue lo comunicativos que eran sus ojos. «Resultaba sorprendente cómo podían cambiar de expresión, sobre todo cuando Adolf hablaba». Aunque, para entonces, el Führer contaba ya con una voz «grave y sonora», Kubizek siempre pensó que su principal atractivo de cara a las masas era esa mirada. «Aún cuando mantenía los labios firmemente apretados, los ojos revelaban lo que quería decir». A la postre, el líder nazi supo aprovechar esta característica y se pasó horas y horas frente al espejo entrenando los gestos y los movimientos de su cara para impresionar, todavía más si cabe, a su público. Aunque para eso todavía faltaban un par de décadas.

A pesar de la expresividad de sus ojos, a Kubizek también le dejó perplejo su oratoria. «Yo le escuchaba gustosamente cuando hablaba. Su lenguaje era muy escogido. Rehusaba el dialecto, sobretodo el vienés, que le era adverso por su tono suave. […] No cabe la menor duda de que mi amigo Adolf fue, ya desde su primera juventud, un hombre dotado de una fácil oratoria. Y él lo sabía, hablaba a gusto y sin interrupción». Lo cierto es que era convincente. Childers afirma en su obra que, en una ocasión, persuadió a un agente de policía de que le dejara libre después de haber golpeado a un chico y haberle causado severas heridas. «Gustaba de probar su fuerza de persuasión en mí y en otras personas», añade su amigo.

Sin embargo, August también dejó patente que Hitler, en realidad, no tenía capacidad de discusión, sino que se limitaba a avasallar al contrario con sus opiniones sin ofrecerle la posibilidad de dar su punto de vista. Así, cuando su amigo le respondía, se limitaba a poner un «gesto de enemistad» y montar en cólera. No era raro entonces que diera golpes contra las paredes y destrozara todo lo que tuviera a mano. «La mayoría de las veces no respondía a lo que yo le había preguntado y se limitaba a interrumpirme con un gesto muy significativo de su mano. Más tarde, me fui acostumbrando a ello y ya no encontraba ridículo que aquel muchacho de dieciséis o diecisiete años desarrollara proyectos gigantescos y me los expusiera con todo detalle».

MANIÁTICO Y MEDIOCRE.
De los recuerdos dulcificados de August (quien apenas recriminó directamente nada a Hitler en sus memorias debido, entre otras cosas, a que los primeros que le pidieron que recopilara los recuerdos de su infancia fueron los miembros del régimen nazi) se infiere también el carácter maniático de su amigo. El futuro Führer tenía, por ejemplo, la manía de colocar sus pantalones, planchados a la perfección, en el mismo lugar un día tras otro. Según él, para evitar que se arrugaran. Y es que, estaba obsesionado con salir de casa siempre bien vestido (casi como un burgués) a pesar de que apenas tenía dinero para comer. Aunque, siempre en palabras de su amigo, eso no era un problema, pues prefería saltarse un almuerzo o una cena en favor, por ejemplo, de ir al teatro.

Según August, otra de sus características más notables es que era muy serio . Una forma educada de señalar que, en ocasiones, su egolatría le hacía despreciar al resto de las personas. Las contestaciones que Kubizek atribuye a su amigo a lo largo de la obra así lo demuestran. En una ocasión, por ejemplo, Adolf no dudó en contestar de la siguiente forma cuando nuestro protagonista le preguntó por la solución de un problema determinado: «Aun cuando hubiera resuelto ya por completo este problema, no te lo diría, porque tú no serías tampoco capaz de resolverlo ». Los « cállate » estaban, también, a la orden del día. Por ello, y a la larga, evitó hablar con él sobre determinadas cosas. «En el futuro dejé de preguntarle sobre temas profesionales. Era mucho mejor seguir en silencio mi propio camino». Aquello debió azuzar más el carácter rudo del joven Führer, que sentía que ganaba todas las discusiones.

Durante los meses en los que convivieron en Viena , Hitler despreció una y otra vez las opiniones y las capacidades de su amigo. A cambio, le repetía una y otra vez que él llegaría a ser un gran artista o un genial arquitecto. Sin embargo, la realidad puso a cada uno en su lugar. En 1907 , Adolf presentó sus dibujos en la Academia de Bellas Artes y fue rechazado. «Estaba tan convencido de que iba a tener éxito que, en el momento de recibir el rechazo, este me golpeó como un rayo salido de la nada», explicó después. En julio volvió a intentarlo, pero falló de nuevo. Kubizek, por su parte, fue admitido en el conservatorio. Aquello debió ser demasiado para él. «Casi sin dinero y avergonzado por su segundo y humillante fracaso en la academia, no quiso volver a ver a Kubizek. Dio el aviso, pagó su parte del alquiler y, mientras su amigo estaba todavía en Linz, sencillamente desapareció sin dejar ninguna dirección de contacto», añade Childers.

Su nueva etapa no fu mejor. Ya en solitario, y sin el sustento que le daba la pensión de sus fallecidos padres, vivió como un verdadero vagabundo . «Durante meses residió en las calles, dormía en los parques y en los cafés que abrían toda la noche, debajo de los puentes, en las entradas de los edificios y, a veces, encontraba refugio en los albergues para indigentes y en pensiones de mala muerte», añade el autor. Se alimentaba en comedores de caridad, no tenía abrigo, vestía como un indigente y se veía obligado a pernoctar en iglesias. Solo logró salir de aquella situación en 1910 , cuando se estableció en una vivienda comunal financiada, en parte, por judíos. Así fue como inició su camino hacia la Cancillería.

Pero eso, como suele decirse, es otra historia...

martes, 15 de febrero de 2022

ESA BOCA (Mario Benedetti)



 Su entusiasmo por el circo se venía arrastrando desde tiempo atrás. Dos meses, quizá. Pero cuando siete años son toda la vida y aún se ve el mundo de los mayores como una muchedumbre a través de un vidrio esmerilado, entonces dos meses representan un largo, insondable proceso. Sus hermanos mayores habían ido dos o tres veces e imitaban minuciosamente las graciosas desgracias de los payasos y las contorsiones y equilibrios de los forzudos. También los compañeros de la escuela lo habían visto y se reían con grandes aspavientos al recordar este golpe o aquella pirueta. Sólo que Carlos no sabía que eran exageraciones destinadas a él. A él, que no iba al circo porque su padre entendía que era muy impresionable y podía conmoverse demasiado ante el riesgo inútil que corrían los trapecistas. Sin embargo, Carlos sentía algo parecido a un dolor en el pecho siempre que pensaba en los payasos. Cada día se le iba siendo más dificil soportar su curiosidad.
Entonces preparó la frase y en el momento oportuno se la dijo al padre: -¿No habría forma de que yo pudiese ir alguna vez al circo?
A los siete años, toda frase larga resulta simpática y el padre se vio obligado primero a sonreír, luego a explicarse: -No quiero que veas a los trapecistas. En cuanto oyó esto, Carlos se sintió verdaderamente a salvo, porque él no tenía interés en los trapecistas.
-¿Y si me fuera cuando empieza ese número
-Bueno - contestó el padre. -así, sí.
La madre compró dos entradas y lo llevó el sábado de noche. Apareció una mujer de malla roja que hacía equilibrio sobre un caballo blanco.
Él esperaba a los payasos.
Aplaudieron. Después salieron unos monos que andaban en bicicleta.
Pero él esperaba a los payasos.
Otra vez aplaudieron y apareció un malabarista. Carlos miraba con los ojos muy abiertos, pero de pronto se encontró bostezando. Aplaudieron de nuevo y salieron —ahora sí— los payasos.
Su interés llegó a la máxima tensión. Eran cuatro, dos de ellos enanos. Uno de los grandes hizo una cabriola, de aquellas que imitaba su hermano mayor. Un enano se le metió entre las piernas y el payaso grande le pegó sonoramente en el trasero. Casi todos los espectadores se reían y algunos muchachitos empezaban a festejar el chiste mímico antes aún de que el payaso emprendiera su gesto. Los dos enanos se trenzaron en la milésima versión de una pelea absurda, mientras el menos cómico de los otros dos los alentaba para que se pegasen. Entonces el segundo payaso grande, que era sin lugar a dudas el más cómico, se acercó a la baranda que limitaba la pista, y Carlos lo vio junto a él, tan cerca que pudo distinguir la boca cansada del hombre bajo la risa pintada y fija del payaso. Por un instante el pobre diablo vio aquella carita asombrada y le sonrió, de modo imperceptible, con sus labios verdaderos. Pero los otros tres habían concluido y el payaso más cómico se unió a los demás en los porrazos y saltos finales, y todos aplaudieron, aun la madre de Carlos.
Y como después venían los trapecistas, de acuerdo a lo convenido, la madre lo tomó de un brazo y salieron a la calle. Ahora sí había visto el circo! Como sus hermanos y los compañeros del colegio! Pero sentía el pecho vacío y no le importaba qué iba a decir mañana. Serían las once de la noche, pero la madre sospechaba algo y lo introdujo en la zona de luz de una vidriera. Le pasó despacio, como si no lo creyera, una mano por los ojos, y después le preguntó si estaba llorando. Él no dijo nada.
-¿Es por los trapecistas? ¿Tenías ganas de verlos?
Ya era demasiado. A él no le interesaban los trapecistas. Sólo para destruir el malentendido, explicó que lloraba porque los payasos no le hacían reír.

domingo, 30 de enero de 2022

UN TRUCO DE LA GALERA


 

Cansado ya de su vida en la Ciudad de Oro,
Un dia decidió marcharse en silencio, sin avisar a nadie.
Atrás habían quedado las torres de su ciudad, esas que habia conocido cuando niño.
Y se fue solo, con su sueño detrás, el que habia alimentado durante toda su vida.
Se abrió paso por el vasto camino hacia las afueras de su pueblo, cruzando sus puertas,
Buscando a alguien con quien compartir su vida.
Aunque no sabía que eso era imposible:
Todo el mundo allá afuera lo contemplaba con extrañeza!
Lloró cuando fue arrastrado y metido en una jaula con un letrero de madera, "BESTIA QUE PUEDE HABLAR" se leía en él.
Esas extrañas criaturas empujaban la jaula, golpeaban sus barrotes, exigiéndole a viva voz que volviera a contar su historia, una y otra vez,
Aunque siempre fuera cuestionada.
Pero pronto se aburrieron de su presa.
"Una bestia que puede hablar?" decían.
"Que es esto, una rareza o un simple ardid publicitario?"
Una noche, decidido, rompió la puerta de su jaula y escapó.
Mientras se alejaba, tomó por el pescuezo a una de las extrañas criaturas, 
Y mirándolo fijamente a los ojos, señaló al horizonte, diciéndole:
"Allí, mas allá de los confines de tu débil y limitada imaginación humana, 
Descansan, deslumbrantes, las nobles torres de mi Ciudad de Oro."
"Déjame llevarte conmigo. Te voy a enseñar muchas historias vivientes."
"Deja que te muestre a otros seres como yo, y te contaré el por qué de mi travesía. Verás que no querrás irte jamás..."
Y así empredieron nuevo viaje juntos, la criatura humana con la bestia que puede hablar,
El primero, contemplando los cuernos y la cola de éste último,
Y escuchando la loca descripción de lo que era su hogar.
Luego de muchos dias de viaje, llegaron a la cima de un monte,
Donde la bestia miraba con desesperación a todos lados, aullando y llorando.
Trató de calmarse, intentando aguzar su visión,
Cuando creyó divisar la cúpula de un capitolio, por supuesto, hecha de oro... Pero no.
Sólo era una ilusión óptica.
Eso era todo...
Volteó para observar a su compañero, pero la criatura humana había huído.
Estaba solo.
Entonces, bajó la colina muy lentamente,
Restregando las lágrimas de sus cansados ojos.
Imaginando relatar a sus pares lo vivido:
"Ellos no tienen cuernos, ni tienen cola. Y no saben de nuestra existencia!"
¿Estaba equivocado al creer en una ciudad de oro, que se extiende en la lejanía?
Y lloró...
Y una voz muy familiar interrumpió sus pensamientos:
"Hola, amigo. Bienvenido a casa..."

jueves, 9 de diciembre de 2021

REFLEXIONES DE UN SOCIOPATA: El Senatorialismo

 


No suelo hablar de política. Mucho menos la sigo, porque me parece, junto con la religión, una de las excusas mas pútridas, bajas, y viles para atrapar y manipular voluntades humanas. Sin embargo, me autodenomino "senatorialista". Que significa "Senatorialismo"? Simple: es algo así como el tipo de ideología política mas extraño del mundo. Tanto, que aun hoy, en pleno S.XXI sigue siendo malentendida.
El Senatorialismo es una forma de antipolítica. Es decir, estipula que los seres humanos no entienden la mayoria de los entramados, de los movimientos políticos que verdaderamente gobiernan y controlan al mundo. Por lo tanto, se crea esta corriente.
Es la forma de anarquía máxima.
El anti-gobierno.
La anti-política.
La idea de que la política en si misma, NO DEBIERA EXISTIR.
Ni partidos, ni gobernantes, ni siquiera un Estado. La idea de todo lo anterior nombrado nos resulta muy mala a los senatorialistas. Esta filosofia e ideologia política está estrechamente relacionada al temperamento y hasta sentido del humor de la "generacion zoomer" (tema que trataré en otro momento)
El Senatorialismo sostiene a rajatabla que los seres humanos no tienen ni la mas mínima idea de qué han venido a hacer en la vida. El propósito no existe. La politica y la ideología politica no son mas que una pérdida de tiempo.
Lo único seguro es la eterna duda.
La unica convicción es que nada es seguro.
Algunas personas describen al Senatorialismo como "el centro extremo del panorama politico".
Nada importa.
Nada tiene sentido.
Ésta es considerada la ideología política mas rara de todas, y a mi personalmente me representa en un 100%.
Sin embargo, y pese a todo lo anterior dicho, una corriente de pensamiento como ésa, es totalmente imposible de practicarse, de aplicarse, de llevar a cabo. Por que? Simple: el mundo, es decir, la gente en un todo, no puede comprender ni concebir la idea de una sociedad sin estado, sin políticas, solo regida por valores tan simples como el sentido común y el respeto mutuo. Sin tener la ambición por el dinero, la ambición por el poder, el hambre por llegar a trepar en las malditas escalas sociales (miserablemente creadas por ellos mismos) como algo inherente a todas las cosas. Sin religiones ni gobernantes. Sin cabecillas de ningun tipo. El día que la gente pueda valerse y pensar por sí sola, solamente ése dia el mundo habrá alcanzado su plenitud, su prosperidad, su dignidad, paz y armonía totales.
Por esa razon el Senatorialismo, mas que una ideología política, es una verdadera quimera. Una mera utopía...

PELICULAS DE TERROR. (Compendio)


 Estos son los films que no pueden faltar en ninguna videoteca de un amante del terror. Clasificados por subgeneros..

ZOMBIES

1- Evil Dead

2- La Noche De Los Muertos Vivientes.

3- El Regreso De Los Muertos Vivientes

4- 28 Dias Despues

5- Planet Terror

6- Dead Alive


SLAYERS

1- Chucky

2- Halloween

3- Pesadilla

4- Viernes 13

5- Hellraiser

6- Phantasm

7- Jeepers Creepers

8- Pumpkinhead


FOUND FOOTAGE

1- Noroi

2- La Puerta Negra

3- VHS

4- Lake Mungo

5- Grave Encounters


LAS BRUJAS

1- Suspiria

2- Las Brujas De Eastwick

3- La Maldicion De Las Brujas


EL DIABLO

1- La 9na Puerta

2- El Exorcista

3- El Bebe De Rosemary

4- La Profecia

5- El Abogado Del Diablo

6- Angel Heart

7- La Puerta Del Diablo


FANTASMAS

1- Poltergeist

2- The Changeling

3- The Ring

4- Dead Silence

5- El Resplandor

6- Los Otros


ASESINOS

1- El Silencio De Los Inocentes

2- Se7n

3- Joy Ride

4- Scream

5- La Masacre De Texas

6- Psicosis

7- Misery


EXTRATERRESTRES

1- Alien

2- The Thing

3- The Blob

4- The Faculty

5- They Live

6- Parasito


GORE

1- Ichy The Killer

2- El Dia De Los Muertos

3- Guinea Pig

4- Audicion


RARAS

1- Video Drome

2- Eraserhead

3- La Escalera De Jacob


HORROR COMICO

1- Troll 2

2- Meet The Feebles

3- El Vengador Toxico

4- Bad Taste

5- Delicatessen


PERTURBADORAS

1- Salo

2- Un Film Serbio

3- Begotten

4- Holocausto Canibal

5- Naked Lunch

6- visitor Q

7- Los Hombres Detras Del Sol

8- Martyrs

9- Cry Baby Lane